DOMINGO 14 DE MAYO DE 2017
El objetivo de este domingo es uno de los montes más bonitos de los que podamos disfrutar, El Txindoki (1436 mts), conocido también como el “Cervino Vasco”, y una de las moradas de la Diosa Mari.
Tras un largo viaje, pasando por Bergara, Ordizia, Puerto de Deskarga, y Beasain, llegamos al parking junto a la Ermita de Larraitz donde, el numeroso grupo, nos preparamos para iniciar la subida.
El día es perfecto, soleado y caluroso, pero no demasiado. Desde el parking, se aprecia la belleza del Txindoki, y el largo camino que nos espera, ya que son 945 metros de desnivel los que hay que salvar desde el parking hasta la cima.
Al fondo del parking, nos encontramos con Zumuako langa, tras la cual se parecía una amplia pista que asciende suavemente, dejando las faldas del Txindoki a nuestra izquierda.
El grupo asciende tranquilo, pero sin pausa, por la pista que nos permite ir ganando altura y apreciar el maravilloso paisaje de esta zona. En un momento dado, debemos abandonar la pista principal, por otra más pequeña situada a la izquierda, y que se adentra en el bosque, y que acaba en Gaztesuiko langa.
Tras franquear este paso, abandonamos el bosque y ya vemos el espolón del Txindoki. Seguimos el camino hasta llegar a la fuente de Oria, donde paramos un poco a beber. Tras el descanso, alcanzamos un pequeño collado, junto a una borda, donde nos reagrupamos y comemos algo antes de la subida final.
Desde este pequeño collado, alcanzamos el collado de Egurral, pasando por unas bordas de pastores. Desde aquí se aprecia entre la roca, el zig-zag que tenemos que seguir para llegar a nuestro objetivo.
La pendiente es grande, pero poco a poco, tod@s nuestr@s menditxikiter@s vamos avanzando, ayudados por el paisaje que comenzamos a ver, Aitzgorri, Aratz, Sierra de Aralar….
Casi sin darnos cuenta llegamos a la cima del Txindoki, un poco cansados. Han pasado tres horas desde que salimos del parking, pero tod@s hemos subido sin problemas. Nos sacamos la foto de grupo en la cima. No hay mucho sitio, así que algunos ni siquiera salen en la foto.
Bajamos de nuevo al collado de Egurral, donde paramos a comer, rodeados de vacas.
Tras la comida decidimos volver por el camino que va paralelo a la regata de Muitze, y hacer así una ruta circular del Txindoki. El camino es muy bonito. Se trata de un pequeño sendero que baja vertiginosamente, aunque sin peligro, hacia el valle.
Tras una zona de senderos de roca, vamos bajando hasta adentrarnos en el bosque que está a los pies del Txindoki, y que nos conducirá de nuevo hasta el parking de donde partimos.
Acabamos un poco cansad@s, porque el camino ha sido largo, pero muy content@s por el día tan bonito que hemos pasado, y como siempre, por la buena compañía, y el mejor ambiente.