Domingo 29 de enero de 2012
DATOS DE LA RUTA
ACCESO: Desde el barrio de Landeral (Guriezo). A este barrio se accede desde la localidad cántabra de Guriezo.
Si accedemos a Guriezo desde el norte (desde la autopista A-8), siguiendo la CA-151, poco después de pasar el centro del nucleo urbano, y antes de abandonarlo, hay que desviarse a la derecha por la CA-511 siguiendo la indicación de Andino, y Angostina, ambos a 1 Km.
Nada más girar a la derecha, cruzaremos el río Agüera por un estrecho puente, y unos 50 m después, un cruce, en el que seguiremos de frente hacia Landeral y Angostina, por la CA-512. 600 m después encontraremos una bifurcación: cogeremos el camino de la derecha hacia Landeral, adonde llegaremos después de 800 m. Allí aparcamos. Altitud: 105 m.
DESNIVEL: 670 m
DISTANCIA: 11 Km ida y vuelta.
TIEMPO APROXIMADO: 4 horas, ida y vuelta
DIFICULTAD: Fácil
El Pico de las Nieves es un torreón rocoso situado en la divisoría entre los ríos Agüero y Asón, se encuentra en el macizo de Ganekogorta.
En su cima se encuentra la ermita de Las Nieves, y desde allí se puede disfrutar de unas vistas espectaculares, incluyendo la playa de Oriñón y la ríade Treto.
DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO REALIZADO:
Hoy hemos quedado en el área de servicio de Ugaldebieta, en la A8, dirección Santander, 1 Km despúes de la salida a Santurce. El pronóstico del tiempo es muy malo, pero tenemos esperanzas de que las lluvias y granizadas intermitentes anunciadas, sean lo suficientemente “intermitentes” como para que podamos disfrutar de esta salida. También sabemos que la fácil excursión de hoy es ideal para un día con un pronóstico meteorológico como el de hoy.
Llegamos al barrio de Landeral (105 m) sin contratiempos y, después de ponernos botas y coger las mochilas, nos ponemos en marcha a las 10:45. Por delante de nosotros tenemos 5,5 Km de subida hasta la Ermita de la cumbre.
Al salir del barrio, nos encontramos con un pequeño cartel guiándonos hacia la derecha para subir al Pico de Las Nieves.
La dirección general de nuestro recorrido hasta el Pico de las Nieves será SUR.
A partir de ahí, el camino no tiene pérdida. Pronto se acaba el asfalto, y comienza una pista en bastante mal estado, por la que sólo circulan tractores, todoterrenos y alguna que otra moto. A los lados de la pista se distinguen de vez en cuando flechas de color verde y alguna que otra marca de color rojo.
Hay muy pocos cruces, y en ellos, hay que hacer siempre caso a la pista principal, sin abandonarla en ningún momento.
Quizás el único momento de duda se da después de 1,7 Km, donde nos encontramos en nuestra pista con un giro de casi 180º. Y en es mismo punto, confluyen otras 3 pistas menores, y claramente menos usadas. Las marcas rojas del suelo y lo usada que está la pista nos muestra el camino claro hacia arriba, haciendo el giro brusco a la izquierda mencionado antes.
Es a partir del tercer kilómetro de subida cuando comenzamos a tener vistas a nuestra derecha de la cima con la blanca ermita como sombrero.
En el poco tiempo que llevamos andando, hemos tenido varios momentos de sol y también una buena descarga de agua.
A 4 Km de la salida nos encontramos con una estrecha carretera asfaltada que sirve de acceso a diversos caseríos y para acceder a los pies del Pico de las Nieves. Hay que cruzar la carretera para entrar en un camino embarradísimo que discurre entre las tapias de dos fincas. Y tan embarrado estaba, que nos vemos obligados a saltar a una de las fincas que bordean el camino, para no ser engullidos por el resbaladizo barro. Después de evitar los 200 m en mal estado, volvemos a saltar la tapia para seguir por el camino.
Desde la carretera, la pista se transforma en un sendero malamente marcado con marcas amarillas y blancas.
Después de 700 m siguiendo este sendero entre espinos y piedras resbaladizas por la reciente lluvia, llegamos al collado de acceso a la cima, en el que nos encontramos unas mesas y una alargada techumbre de hormigón. Desde ahí, tenemos una vista directa de la ermita, distante de nosotros ya solo unos 400 m. Estamos a unos 700 m de altitud.
Dado que el cielo vuelve a oscurecerse amenazadoramente, decidimos refugiarnos y comer, esperando que despeje para hacer el último esfuerzo.
Y como parece que el cielo, viendo que estamos bajo refugio, no se decide a descargar, terminamos la comida, y salimos hacia la cima, dejando atrás nuestro refugio.
En cuestión de 15-20 minutos, llegamos a la cima. La subida, contando con paradas nos ha llevado 2 h 50 minutos, lo cual no da una buena media para 5,5 Km.
A espaldas de la ermita nos encontramos un vértice geodésico, y enfrente de su puerta una cruz y una serie de placas conmemorativas.
La vuelta la hacemos por el mismo camino, sin ningún contratiempo que reseñar, aparte de varios resbalones y “culadas” en el barro.