Rutas por mes

Archivo de junio de 2010

Domingo, 20 de junio de 2010

                      Ermita en la cima del Kolitza

Ermita en la cima del Kolitza

Hora y lugar de encuentro: A las 10:30 en el barrio de Pandozales, a unos dos kilómetros de Balmaseda (Bizkaia).

DATOS DE LA RUTA:

Acceso: Barrio de Pandozales, en Balmaseda (Bizkaia), situado a unos 273 m. de altitud. Para llegar allí desde Bilbao hay que coger la A-8 y tomar la salida 119 para incorporarse a la BI-633 dirección Balmaseda. Posteriormente abandonamos la BI-633 para tomar la BI-634 hacia Amurrio. Unos metros después nos encontramos una rotonda y seguimos recto por la Avenida de las Encartaciones, en Balmaseda. Después de pasar junto a las escuelas Mendia tomamos una desviación a la izquierda situada entre el Hotel San Roque y la Autoescuela Kolitza. Llegamos así hasta una gasolinera que dejamos a nuestra derecha para continuar por la calle Virgen de Gracia. A partir de aquí una carretera de unos dos kilómetros nos conduce sin pérdida alguna hasta el barrio de Pandozales, perteneciente al ayuntamiento de Balmaseda.

Desnivel: Unos 606 m.

Tiempo aproximado: 2 h 15´  (1 h 15´ de ascensión).

Dificultad: Fácil.

Situado en el extremo oriental de los montes de Ordunte, el Kolitza es, junto con el Gorbeia, Oiz, Sollube y Ganekogorta, uno de los cinco montes bocineros desde los que se convocaba durante la Edad Media a las Juntas Generales del Señorío de Bizkaia, las cuales se celebraban al menos cada dos años. En estas emblemáticas y privilegiadas cimas se encendían hogueras y se hacían sonar bocinas para que los junteros de cada merindad acudieran a congregarse en torno al viejo roble de Gernika.

DESCRIPCIÓN DEL RECORRIDO REALIZADO:

Iniciamos la marcha en uno de los puntos de acceso más habituales y característicos para ascender a la cumbre del Kolitza: el barrio de Pandozales de Balmaseda, por un camino perfectamente marcado que coincide con el sendero de gran recorrido de la Vuelta a Bizkaia (la GR-123).

Casi al final de la carretera que conduce al barrio balmasedano de Pandozales tomamos a la derecha una pista hormigonada que asciende dirección NE y que, poco después de describir un fuerte giro a la izquierda, se transforma en una pista de gravilla que abandonamos para coger un camino de tierra situado a la derecha en cuyo inicio está escrito con pintura roja el nombre de nuestro objetivo: Kolitza.

Inicio de la pista

Indicación en el primer desvío

Primera desviación

Ascendemos suavemente entre un bosque de robles y pinos para posteriormente coger otra desviación a la izquierda que se haya claramente indicada con unas marcas blancas y rojas pintadas en el suelo y que desemboca poco después en una pista de grava que escasos metros más adelante hay que abandonar de nuevo para tomar otra desviación a la derecha, esta vez sin señalizar.

Segunda desviación

Tercera desviación

Seguimos adelante  hasta encontrarnos con un nuevo desvío a la derecha, perfectamente indicado con marcas rojas y blancas. Desembocamos en una ancha pista que atravesamos para continuar de frente por un camino de tierra.

El Kolitza desde el collado Campo del Espino

En nuestra ascensión nos encontraremos después con dos cruces de caminos en los que optaremos por el vial central, siguiendo en este caso también las marcas rojas y blancas de la GR. Así desembocamos de nuevo en una pista de gravilla, continuamos a la izquierda, y justo después de que la citada pista describa una curva a la derecha, podemos contemplar a lo lejos, enfrente de nosotros, la silueta inconfundible del Kolitza con su conocida ermita protogótica erigida en medio de su cima. Estamos en el collado Campo del Espino, a 569 m. de altitud.

Podríamos continuar por la pista de gravilla pero, en lugar de ello, optamos por un camino más corto pero de pendiente algo más pronunciada. Así que tomamos una desviación a la derecha, perfectamente indicada con una piedra en cuya superficie está pintado el nombre del Kolitza y que nos interna en un pequeño bosque de coníferas.

Después de abandonar el bosque continuamos por el mismo sendero sin desviarnos en ningún momento y llegamos así a una bonita fuente en cuya piedra está grabado el nombre del monte al que nos dirigimos. Tras refrescarnos allí y tomar un ligero tentempié, tomamos la pista situada a la izquierda de la citada fuente y continuamos nuestra ascensión por la cresta oriental del Kolitza.

Desvío a la derecha

Fuente y pista a la izquierda

La pista, al principio de gravilla, se convierte poco después en un sendero y posteriormente en una senda que asciende vertiginosamente describiendo amplios zigzags para depositarnos en poco tiempo en la cumbre del Kolitza (879 m). Allí nos recibe la preciosa ermita medieval levantada en honor a San Roque y San Sebastián con el vértice geodésico instalado en su lateral oeste y en cuyos muros se haya incrustado un viejo buzón sin puerta junto a unas cuantas placas conmemorativas. Preciosas vistas panorámicas de Cantabria, la Sierra Salvada y el cordal que forman los montes de Ordunte.

Al lado de la ermita

Misión cumplida. Descendemos por la vertiente oeste del Kolitza, la menos pronunciada, hasta llegar al collado de La Nevera (820 m), situado entre el Kolitza y el Terreros y cuyo nombre le viene de un antiguo nevero construido para el acopio de nieve invernal. Allí se encuentra un refugio de montaña y el área recreativa La Nevera, donde decidimos detenemos a comer y a disfrutar del único día no lluvioso de esta atípica última semana de primavera.

Hacia el collado La Nevera

Área recreativa La Nevera

Regresamos a Pandozales por el mismo camino por el que habíamos subido. Una tranquila excursión que se ha desarrollado sin ningún contratiempo reseñable.

Domingo, 13 de junio de 2010

Hoy Forum Sport organizaba la 5ª edición de la Kosta Trail con su triple modalidad de Carrera de Montaña, Marcha de Montaña y Marcha Familiar y cuya recaudación se destina íntegramente a fines benéficos. Este año, en concreto, el dinero obtenido de las inscripciones ha sido donado en su totalidad a la Fundación Vasca de Esclerosis Múltiple Eugenia Epalza.

Y cómo no, una vez más algunos de los miembros de Menditxiki nos hemos animado a participar en la Marcha Familiar y en la Marcha de Montaña, lo que nos ha permitido disfrutar de nuevo de la belleza de las playas y acantilados que recorren todo el litoral de Uribe Kosta.

Ambas marchas montañeras han arrancado –tal y como estaba previsto– a las 9:30 de la plaza del Ayuntamiento de Sopelana y han finalizado en la bonita localidad costera de Plentzia bajo un cielo cubierto de nubes amenazantes que, sin embargo, no han llegado a descargar ni una sola gota de lluvia.

Los participantes en la Marcha Familiar han recorrido un total de 12 tranquilos kilómetros (Sopelana – Sopelmar – Barrika – Plentzia) sin apenas desnivel, mientras que aquellos que se han decantado por la Marcha de Montaña han completado 20 kilómetros con un desnivel positivo de 659 metros que incluía la ascensión al Ermuamendi (289 m).

En cualquier caso, ha sido interesante sumergirse una vez más en esa marea humana formada por más de 1.500 personas que caminaban en hilera por la costa vizcaína dando un toque colorista y alegre a una marcha que va batiendo récords de participación año tras año.

Y después de la marcha, los integrantes de Menditxiki que hemos participado en ella nos hemos acercado a comer a una acogedora cervecera de Plentzia como broche final a esta pequeña reunión de aficionados a la montaña.

Aquí os dejo algunas de las fotos que nos hemos sacado hoy:

DOMINGO, 06 DE JUNIO DE 2010

Ruta entre Desfiladeros

Ruta entre Desfiladeros

Hora y lugar de encuentro: A 11:00 en el puerto de Lunada, situado en Espinosa de los Monteros, pequeña localidad burgalesa a la cual se accede por la BI-636 dirección Burgos

DATOS DE LA RUTA:

Acceso: Desde el Centro de Interpretación «Ojo Guareño» situado en la localidad burgalesa de Quintanilla de Rebollar.

Desnivel: unos 150 m.

Tiempo aproximado: 2h 50´ en total. 11,8 Km

Dificultad: Baja

La aventura:

Tras una hora y media en coche, y después de adentrarnos en la Comunidad Autónoma de Castilla y León, llegamos al puerto de Lunada, con la intención de hacer nuestra primera cima burgalesa (El Pico de la Miel), o ¿será cántabra?.

Subiendo hacía el puerto nos asombramos de la belleza del lugar. Las balconadas de rocas y los pequeños neveros nos hacían presagiar que la ruta iba a ser interesante. ¡Inocentes! No sabíamos que el tiempo no nos iba a dejar disfrutar del paisaje. Dirección al puerto comenzó a aparecer la niebla, la llovizna y el coche nos marcaba pocos grados.

Llegamos, salimos del coche, ¡qué frío!, pero si estamos en junio, casi verano, y ¡sólo hay 8 grados!. Una sensación térmica muy baja.

Puerto Lunada

Puerto Lunada

No podemos hacer la ruta, no se ve nada. Hay que tomar una decisión. ¿Qué hacemos?, ¡nos vamos!, ¿a dónde?, a la estación de esquí de Lunada (está a menos altura). Ya en este lugar nos volvemos a bajar de los coches, otra vez, el frío es el mismo y la visibilidad casi nula. Otra vez a los vehículos dirección Espinosa de los Monteros, a buscar alguna ruta que nos permita caminar un poco y disfrutar de un domingo en la naturaleza.

Mientras bajamos el puerto, la niebla va desapareciendo y nos permite contemplar el paisaje de la zona, con sus montañas de roca elevadas y de las casas de los lugareños, con sus parcelas divididas por muros de piedra bien ordenadas.

En Espinosa buscamos la oficina de Información y Turismo, ¡cerrada! Un menditxikizale ha comprado unos mapas de la zona y le han dicho que a dos o tres kilómetros está el Centro de Interpretación “Ojo Guareña”, y que allí nos podrán orientar.

Centro Interpretación

Centro Interpretación

Centro Ojo Guareña

Centro Ojo Guareña

Volvemos a los coches y cogemos carretera Reinosa (BU-526) para dirigirnos a la pequeña localidad de Quintanilla de Rebollar, dónde se encuentra el Centro de Interpretación. Aquí nos dan varios folletos y después de ver las opciones nos decantamos por una ruta circular entre una de las Siete Conchas que rodean la zona la cual lleva por nombre “Ruta entre Desfiladeros”.

Os contaré que las Siete Conchas es un conjunto de montañas dispuestas en fila de este a oeste y que, como su nombre indica, tienen similitud a una concha.

Descripción del recorrido realizado:

Comenzamos a caminar desde el centro de interpretación de Ojo Guareña. Al lado del cartel informativo, que describe las tres rutas que parten de allí, hay tres escalones de tierra que nos conduce a un camino bien marcado con balizas de madera, en las cuales hay pintadas rallas amarillas y blancas. La ruta es la PRC-40.

Iniciando el camino

Iniciando el camino

Vista al frente

Vista al frente

Vemos a nuestra derecha el edificio del centro de interpretación, el cual vamos dejando atrás para encontrarnos con una casa que también dejaremos a nuestra derecha. Llegamos a la carretera del pueblo y giramos a la izquierda, atravesando un pequeño puente. Continuamos unos 100 metros por esta carretera y después de pasar un cartel que nos indica el lugar dónde se encuentra la estación de FEVE, topamos con un cruce de caminos. A la izquierda hay un cartel indicador que nos dice que tenemos que coger la desviación de la derecha, siguiendo, siempre las marcas amarillas y blancas que nos encontraremos en todo el recorrido.

Continuamos y después de unos 700 m tenemos que cruzar una carretera comarcal, con mucho cuidado porque hay tráfico, y seguimos la senda que está enfrente.

Con cuidado

Con cuidado

¿Qué es?

¿Qué es?

Un sherpa

Un sherpa


Cuando llegamos a la bifurcación dónde el recorrido ya es completamente circular, giramos a la izquierda en vez de a la derecha como nos indican los postes. Hemos decidido que vamos a hacer la ruta al revés. ¡Es qué somos así!

El primer tramo es de pista, por el cual caminamos durante un kilómetro. Nos adentramos en un sendero a la derecha dejando la pista que traíamos y comenzamos a caminar entre un bosque de encinas hasta que llegamos al pueblo de Hornillolatorre. Al salir de la senda nos encontramos con la iglesia de Santa Marina y después de hacer las fotos de rigor seguimos nuestro camino. Por lo tanto, dejamos la iglesia atrás y caminamos entre casas por una calle que baja hacia la derecha para luego volver a un sendero de tierra que pasa junto al cementerio del pueblo. Seguimos caminando y llegamos al Desfiladero de la Hoz (el punto más alto de la ruta) y, como ya es hora de comer, disponemos nuestras “viandas” para darnos un merecido descanso y llenar nuestros estómagos. Escuchamos el canto de lo que suponemos es un búho o un cuco, que junto con colirojo tizón y la lavandera cascadeña, componen la fauna de la zona. Después de comer, tres aguerridos montañeros deciden que van a ir a la cima de la concha y se adentran por un camino, a la derecha, en el pequeño bosque de sauces, chopos y zarzas. Mientras tanto, las aguerridas montañeras cuidan de los retoños y se disponen a seguir la ruta marcada.

Subiendo el desfiladero

Subiendo el desfiladero

Arriba, en el desfiladero

Arriba, en el desfiladero

Desfiladero de la Hoz

Desfiladero de la Hoz

Mientras bajamos nos entretenemos con los animales de la zona: hormigas grandes y pequeñas, arañas, orugas… y también hacemos flautas. Nuestros chicos, que nos esperan en el pueblo de Cornejo, deciden que van a ir a buscar los coches. Nos tomamos el café de rigor y esperamos a que nos vengan a recoger, porque se ha hecho muy tarde y aún nos quedan 4 km de vuelta. Y ya todos juntos vamos a Espinosa de los Monteros y nos comemos ricas pastas que algunos “golosos” deciden comprar.

Buscando el camino

Buscando el camino

Vista de pájaro

Vista de pájaro

La concha

La concha

No hemos hecho el Pico de la Miel, pero está ahí, cualquier otro día lo intentamos. De todos modos, hemos hecho una ruta muy bonita y la zona merece la pena. Hay muchos lugares por descubrir.

La ruta

La ruta

Folletos informativos (para ampliarlos, haced click con el botón derecho del ratón, pinchad en «abrir imagen en una ventana nueva» y a continuación haced click sobre la imagen):